Sobre los caudales en abril de 2017 en el eje del Tajo
En la entrada «Sobre el trasvase de abril de 2017. También en nivel 4 de las Reglas de Explotación» se realizaba una predicción del comportamiento de Entrepeñas y Buendía basada en la aplicación estricta de los desembalses de referencia y en la predicción (o invención ─aplicable la viñeta de El Roto en El País del 2/5/2017─) de aportaciones del RD 773/2014. Sin embargo, la evolución en el mes de abril ha sido peor de la prevista según ese modelo, siendo una causa que el desembalse realizado hacia el Tajo ha sido superior al desembalse de referencia de abril, a tenor de los datos publicados en el SAIH del Tajo para la estación de Almoguera y los desembalses desde Bolarque publicado en los partes semanales de la Confederación Hidrográfica del Tajo. La causa de este mayor desembalse está en un adelanto de la demanda del Tajo ante las condiciones climatológicas de alta temperatura y falta de aportaciones.
Se puede entender este comportamiento como un anticipo de lo que vendrá en verano. De los datos facilitados por la Confederación Hidrográfica del Tajo en el apartado «Caudales ecológicos y caudales mínimos» de su web se puede hacer una lectura muy interesante. A continuación se reproduce una gráfica que se puede obtener directamente en ese apartado con los caudales medios diarios que circularon por el Tajo medio en el mes de abril de 2017:
En esta gráfica se muestra como a principios del mes de abril se tiene una situación normal, con un caudal en Toledo superior al de Aranjuez y en Talavera de la Reina superior a Toledo. Conforme avanza el mes se observa como desciende el caudal en Toledo, pero mucho más rápido en Talavera de la Reina, llegándose a igualar a mediados del mes, siendo entre el 15 y el 29 de abril más bajo en Talavera de la Reina. La causa está en las detracciones de los regadíos del Tajo, que han adelantado la época de riego ante las altas temperaturas y la falta de lluvia. Sin embargo, en el último fin de semana del mes llovió, lo que causa una menor necesidad de regadío y un leve aumento del caudal circulante que se aprecia al final de la gráfica.
Si el mes de mayo sigue la tónica de abril, los regadíos volverán a demandar agua y los caudales del Tajo volverán a bajar. A tenor de la experiencia de los dos últimos años, el cumplimiento del caudal mínimo de 10 m³/s en Talavera de la Reina estará en riesgo y serán precisos desembalses adicionales desde la cabecera, que no están contemplados en el cálculo de los «desembalses de referencia». A esta situación se llega con las reservas de la cabecera del Tajo por debajo de los 400 hm³. Es decir, no se cumplen las condiciones en las que el documento justificativo del Memorándum («El sistema de cabecera del Tajo y el trasvase Tajo-Segura»; Francisco Cabezas; diciembre de 2013) asegura falazmente que las demandas del Tajo están garantizadas; o expresado en otros términos, los usos consuntivos del Tajo se encuentran actualmente en precario (no garantizados).
Otro aspecto relevante es el caudal en Aranjuez. El caudal medio en el mes de abril fue de 7,8 m³/s, lo que de nuevo contradice las hipótesis de los cálculos del Memorándum, que se basan en que por Aranjuez deben circular 6 m³/s estrictos. Pero además se aprecia que a principio de mes hay un descenso de caudales en Aranjuez que se tuvo que corregir con un incremento brusco de desembalse desde Almoguera (en la gráfica se aprecia como el incremento se produce el día 3 pero que tarda más de un día en llegar a Aranjuez). Aun así, a pesar de que siempre el valor medio diario en Aranjuez supera el mínimo legal de 6 m³/s, a lo largo del mes de abril se dieron 23 mediciones horarias en las que el caudal del SAIH estaba por debajo de los 6 m³/s. Para corregir la situación se aprecia cómo tuvieron que aumentar los desembalses desde Almoguera (y por ende, también de Bolarque); aunque no se den datos oficiales al respecto es seguro que en el mes de abril se han superado con creces los desembalses de referencia, lo que es otra muestra más de que con el Memorándum no se encuentran garantizados los usos del Tajo, ni siquiera los consuntivos.
El verano se presenta difícil. Se iniciará con Entrepeñas y Buendía en nivel 4 de las reglas de explotación lo que impedirá aprobar trasvases pero no injerencias del lobby trasvasista en la gestión del Tajo. Además, las supuestas garantías para la cuenca cedente son falsas, pues están basadas en cálculos e hipótesis erróneos fijados en el Memorándum. ¿Se cumplirán los pírricos caudales mínimos en Aranjuez y Talavera de la Reina? ¿Habrá limitaciones a los regadíos del Tajo (abiertas o encubiertas)?
¿Se aprobará otro trasvase en mayo?
A 1 de mayo de 2017 las existencias en Entrepeñas y Buendía eran 393 hm³ (dato no oficial calculado a partir de los datos del SAIH del Tajo), de los que quedan pendientes de trasvasar unos 15 hm³ (de nuevo, dato no oficial calculado a partir de los trasvases aprobados y los caudales aforados en el trasvase publicados en el SAIH del Tajo), estimándose las existencias efectivas en unos 378 hm³. Teniendo en cuenta que el MAPAMA considera el límite de 368 hm³ como umbral de no trasvase, habría unos 10 hm³ de excedentes. Sobre si se aprobará otro trasvase en mayo, Francisco Cabezas, en la entrevista publicada en La Verdad el 30/4/2017, afirma: «Aún no se sabe. La Comisión lo estudiará con detalle los próximos días. No se puede afirmar todavía que haya trasvase cero, aunque la probabilidad es muy alta debido al agotamiento de la cabecera del Tajo». Se apruebe o no otro trasvase, lo más probable es que a lo largo del mes de mayo se entre ya en el nivel 4 de las reglas de explotación, con descenso continuado de las reservas durante el verano. Que unos embalses hiperanuales, de gran capacidad, se encuentren a inicios de mayo a un 15% de su capacidad es esperpéntico. La gestión es un desastre, pero se culpa a la sequía mientras se evita reconocer la causa real de la situación.