Se suelta una ocurrencia por los medios de comunicación regionales para hacer presión. Si esta genialidad supone un beneficio al lobby de regantes del Trasvase, adquiere el rango de propuesta firme, que ha de ser aceptada por la Administración, o si es denegada ha de pagar un coste o compensación. Algo de esto es lo que está ocurriendo con el intento de dar recursos del Júcar a los regantes del trasvase Tajo-Segura. A continuación se muestra una pequeña cronología de noticias publicadas:
- 13 de junio de 2017: «La cuenca del Júcar tiene agua para enviar a Alicante y Murcia» (La Verdad). Citando como fuente a «los regantes», se indica que hay recursos en los embalses de Tous y Bellús, que podrían ser permutados por asignaciones de Alarcón, de forma que se podrían derivar caudales adicionales desde Alarcón al Segura por el Acueducto Tajo-Segura.
- 11 de julio de 2017: «Los regantes piden que se construya un minitrasvase del Júcar al Segura» (La Verdad). Se plantea prolongar el trasvase Júcar-Vinalopó hasta el Azud de Ojós (cabecera de los canales del postrasvase Tajo-Segura) y que se reasignen recursos del Júcar al Segura.
- 16 de julio de 2017: «El Júcar bloquea el riego de socorro a Murcia con agua que se vierte al mar» (La Opinión de Murcia). Lamento porque la Confederación Hidrográfica del Júcar no facilite las peticiones de los regantes del Trasvase.
Sólo la lectura de los titulares da una idea de por donde van las noticias, que se completa con su lectura. Es un intento de apropiarse de recursos del Júcar ya sea provisional o permanentemente. Utilizando el victimismo. Se menciona la cesión de derechos, pero ¿hay algún acuerdo de cesión desde los usuarios del Júcar al SCRATS? Advierten que serían caudales que «se perderán en el mar», dando por asumido que el que los ríos vayan a dar a la mar es un despropósito. Si no se realiza lo que piden es una afrenta que requerirá una reparación o compensación de otro tipo.
Este episodio de intento de asalto a los recursos del Júcar parece ser un ejemplo de lo que se está cocinando como «Pacto Nacional del Agua». Planteamiento de ideas descabelladas, tratadas fuera de los ámbitos de planificación. Despreciando los mecanismos establecidos al respecto, incluida la información y participación pública. ¿Qué otros engendros se estarán perpetrando en las reuniones ocultas?