Hay que reconocer la habilidad del Secretario General del Medio Ambiente con la palabrería, tanto al buscar las ocasiones para emplearla como para elegir los términos adecuados. Es un modelo de la nueva política, en la que parece valorarse más al charlatán de feria que al solucionador de problemas. Así, se organiza un viaje a Murcia, con la excusa de un Consejo de Administración de la Mancomunidad de Canales del Taibilla, para tener ocasión de afirmar ante los medios: «No encuentro ninguna razón para que el trasvase no siga funcionando en los términos en los que ha venido funcionando» (Europa Press, 13/12/2018). Con esta intervención pretende acallar los tambores de guerra alentados por el lobby, mostrando una vez más la sumisión de la Administración ante unos intereses particulares. A la vez que manifiesta cuál es su aspiración con la política del agua: no hacer nada.
Acertadamente, «Los Ribereños recuerdan a Morán que “hay miles de razones por las que cerrar el Trasvase”» (Liberal de Castilla, 14/12/2018). No se trata de cerrar por cerrar, falta de solidaridad o cualquier otra chorrada que se pueda pensar. Es porque el funcionamiento del Trasvase está siendo desastroso. Es un auténtico fracaso, sin paliativos. Pero beneficia a un lobby al que todos los estamentos le tienen miedo.
Con estas declaraciones, Su Ilustrísima aspira a colocarse al frente del ejército de gallinas que desde nuestra Administración lucha para que el lobby siga contando con sus privilegios. Aunque se destroce el Tajo, se incremente el gasto del Estado en subvenciones y prebendas, se condene a los municipios ribereños de Entrepeñas y Buendía y se sigan esquilmando los recursos hídricos del Tajo y del Segura. De cara a la galería, su actuación se limita a hablar con redondas ─y por ahora huecas─ palabras de los daños que el cambio climático pueda traer de cara al futuro, pero sin preocuparse lo más mínimo de la situación del presente.
No esperamos del actual equipo una actuación digna, encaminada a la defensa del interés general. Pero le recordamos una razón para cambiar el funcionamiento del trasvase Tajo-Segura: cumplir la Ley, la propia Ley del Memorándum. Ley que insta a cambiar los parámetros de las reglas de explotación para evitar las situaciones de excepcionalidad hidrológica.
Como muestra del caótico funcionamiento actual del Trasvase, se reproducen a continuación dos gráficas, que representan el porcentaje de meses que se ha estado en cada nivel de las reglas de explotación ─incluido el nivel 5, en el que ni siquiera se encuentran garantizados los usos del Tajo considerados para los desembalses de referencia─ y la evolución de los volúmenes embalsados
Desde que están vigentes las actuales reglas de explotación, el 79% de los meses se ha estado en situación de excepcionalidad hidrológica o peor. En el 12% de los meses la atención de los usos del Tajo “oficiales” ha estado comprometida. ¿No es este desolador escenario motivo suficiente para cambiar ya los términos en los que funciona el trasvase Tajo-Segura?
Buenos días,
no entiendo la gráfica donde se expresan los umbrales desde la aprobación del RD hasta este mes de diciembre, al menos no cuadran con el artículo 1 de dicho RD, donde los umbrales (N2 y N4) no se establecen como líneas móviles dependientes del mes, como sí ocurre en N3, sino que son fijos, en el caso del más restrictivo de 400 hm(3).
Es un tema que me resulta de interés y me gustaría conocer toda la información antes de poder tener una opinión formada por lo que me gustaría aclarar este extremo.
Gracias y un saludo
La subida del umbral mínimo de 240 a 400 hm³ no fue instantánea, sino que fue por escalones, entrando el valor definitivo de 400 hm³ el 1/1/2018 (ver las disposiciones transitorias en las leyes 21/2013 y 21/2015; otra cosa es la polémica que hubo con la aplicación de este transitorio).
Si se fija, el valor del límite entre los niveles 3 y 4 permanece constante a lo largo del año, subiendo en escalos de 32 hm³ al final de cada uno. En paralelo, la separación entre el nivel 2 y 3 también varía. Está representada la variación que aparece en el documento que se dio como justificación del RD 773/2014, que es la que siguió la Comisión Central de Explotación del ATS a partir de abril de 2015. En el mes de marzo de 2015 hubo algo de lío, pues no estaba claro cómo se interpretaba la transición de la antigua curva a la nueva.
Hola,
pues ahora sí que me ha quedado todo claro, muchas gracias por la información, aclaración e interpretación de la normal.
Saludos.