Legal o ilegal, el impacto del regadío está

En las reacciones al desastre al Mar Menor parece que ya hay un objetivo: acabar con el regadío ilegal. Ya hay villano contra el que actuar. Todos de acuerdo. Ahora bien, ¿significa que sin sopa verde no habría problema con el regadío ilegal? ¿Acaso el regadío legal en el Campo de Cartagena se diseñó para evitar daños al Mar Menor, un problema que ni se planteaba?

Acabar con una actividad ilegal está bien, pero no tendría que ser noticia. Es intrínseco de una buena gestión. Sin aspavientos, con coordinación entre las Administraciones Públicas y con procedimientos claros y eficaces. Que ahora se ponga énfasis ahora en combatirlo quizás sea porque implícitamente pudiera haberse estado permitiendo. Si fuera este el caso, bienvenido sea el cambio.

Sin embargo, esta novedosa lucha contra el regadío ilegal parece una excusa para no afrontar el impacto que causa el regadío legal. Un impacto que el lobby agrario trasvasista murciano quiere rebajar, o incluso negar, con una ofensiva propagandística que nos muestra que su regadío es light con etiqueta ecofriendly. Nos congratulamos de que se estén adoptando medidas para reducir la carga de fertilizantes. Aunque frente a esta propaganda están las imágenes de peces muertos y aguas verdes entrando al Mar Menor por las ramblas. ¿Qué hay de cierto?

Repetimos, está muy bien todo lo que se haga por mejorar las prácticas agrarias y perseguir actuaciones delictivas. Tanto en el regadío ilegal como en el legal. Es algo que se debe hacer sistemáticamente en cualquier regadío, no sólo en la cuenca del Mar Menor. Ahora bien, todo el regadío del Campo de Cartagena, con concesión o sin ella, es una presión que está causando un grave impacto sobre el Mar Menor. Si no se plantea bien el problema, si excluimos una parte por causas socio-económicas-políticas, no se va a ningún sitio. Por lo que se ve, no hay valor ni ganas ni interés, no ya en solucionar la situación, sino simplemente en hacer un análisis serio. Tras años mirando para otro lado y dejando hacer, la solución consiste en usar otra verborrea para seguir haciendo lo mismo.