El lector que haya tenido la humorada de entrar en el borrador del Plan Especial de Sequías (PES) de la cuenca del Tajo (o en el de otra cuenca cualquiera, pues, para lo que vamos a decir más abajo, son trajes cortados por el mismo patrón); digo, que si algún mortal ha entrado en el PES del Tajo, se ha podido topar con el cuadrito que se recoge en la entrada «De como el PES del Tajo plantea restricciones a las demandas del Tajo que compiten con el trasvase Tajo-Segura» y que se reproduce a continuación.